El crimen casi perfecto

Ay ay ay, qué librazo que les traigo hoy en día.
Están preparados?

Hola, como les va hoy en dia?
Espero que muy bien.

El crimen casi perfecto de Roberto Arlt es un cuento escrito por el autor y publicado alrededor del año 1940. Es un relato, como resulta obvio, de carácter policial que goza de una excelente trama que se desenlaza en pocas páginas. He leído en algún sitio que la clave para que un relato policial de suspenso sea bueno es que en ningún momento el investigador sepa más que la persona que está leyendo. Pues este es un ejemplo de ello. En una trama de suspenso donde la imaginación del lector es puesta a prueba para evaluar la forma en la que la señora pudo ser asesinada, Arlt nos sorprende de la mejor manera. Una lectura bastante agradable y de fácil acceso.

Resumen: Opinión personal

Un oficial de policía debe investigar una curiosa muerte. Una señora de edad madura ha fallecido en su casa mientras bebía un vaso de Whisky y leía el diario. Todo parece indicar que ha sido un suicidio ya que la señora ha colocado cianuro de potasio en su vaso. Si bien la mayoría se conforma con la hipótesis el oficial no está conforme ya que hay demasiados hechos que no cierran en la historia. Ese mismo día era el cumpleaños de la víctima y ha almorzado con sus hermanos sin dar señales de depresión. La criada ha recibido la orden de buscar el diario y luego se ha marchado, dejando todo cerrado. En el cuerpo no parece haber señales de suicidio y no encuentran el frasco dónde ha estado la poción de la muerte. Todos sus hermanos, que curiosamente se ven beneficiados con el fallecimiento de la señora ya que reciben una gran suma de dinero, tienen coartadas perfectas y parecen no estar involucrados.

El caso está casi cerrado cuando el policía, estando en un bar, tiene la idea perfecta. Deja lo que está haciendo y concurre en busca de la mujer que trabaja en la casa, sólo para hacerle una pregunta. La señora ¿tomaba su whisky con hielo? A partir de ahí la trama consistirá en averiguar de dónde provenían los hielos envenenados y quién ha sido el culpable de colocarlos ahí, aunque desgraciadamente el autor se quita la vida momentos antes de ser apresado.